Cada año, en algunos rincones privilegiados de los Alpes, el Macizo Central y los Pirineos, el narciso de los poetas cubre los prados de vegetación, de hierba, que rodea los pueblos de media montaña, alargando unas semanas el manto invernal. Esta delicada planta es apreciada por su aroma en las principales casas de perfumes.
En los Pirineos Orientales, dentro del Parque Natural Regional de los Pirineos Catalanes, su recolección ha despertado un afán económico generando conflictos entre equipos de recolectores, municipios y agricultores locales propietarios o con derechos sobre las parcelas recolectadas.
El parque se ha movilizado para ofrecer un marco de debate a todas estas personas y establecer normas de recolección, mediante un pliego de condiciones de buenas prácticas y un acuerdo que vincule a los recolectores y a los propietarios y beneficiarios de las parcelas en cuestión. Este marco permite a las diferentes partes aprender a conocerse, respetarse, afrontar los usos de cada uno y, en última instancia, confiar los unos en los otros… ¡o incluso disfrutar alrededor de una barbacoa de cierre de temporada, como la realizada en 2024!